Prueba BMW R1250RT
La Gran Turismo de BMW para viajes y aventuras
MOTOS
Mi prueba de la BMW R1250RT con radar por las carreteras de Mallorca
Hola, soy Miguel, y hoy os voy a contar mi prueba de la BMW R1250RT con radar, una moto que me ha dejado impresionado por su rendimiento y su tecnología. La R1250RT es una de las motos más populares y exitosas de la marca alemana, y tiene una larga trayectoria en el mercado. Se trata de una moto de gran cilindrada, con un motor bóxer de dos cilindros opuestos y 136 CV de potencia, que ofrece unas prestaciones impresionantes, tanto en aceleración como en velocidad. Pero también es una moto pensada para viajar, con una ergonomía cuidada, una protección aerodinámica eficaz, un equipamiento completo y una capacidad de carga generosa.
La novedad más destacada de la BMW R1250RT es el sistema de control de crucero activo con radar, que se ofrece como opción y que permite mantener una distancia constante con el vehículo que va delante, adaptando la velocidad automáticamente. Este sistema, que ya se usa en los coches, es una ayuda para el conductor, que puede relajarse y disfrutar del viaje, sin tener que estar pendiente del acelerador o del freno. El sistema de radar tiene tres niveles de ajuste, y se puede desconectar si se desea.
La ruta por Mallorca
Para probar la BMW R1250RT con radar, elegí una ruta por Mallorca, una isla española famosa por sus playas y su clima mediterráneo. Mallorca tiene también unas carreteras muy variadas y divertidas, que recorren la costa, la montaña y el interior. Es un lugar ideal para disfrutar de la moto y del paisaje.
Salí desde Palma, la capital de la isla, y tomé la carretera de Sóller, que atraviesa la sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La carretera de Sóller es una de las más bonitas y espectaculares de Mallorca, con unas vistas impresionantes del mar y de la montaña. Tiene unos 30 kilómetros de longitud, con una pendiente media del 6%, y una altitud máxima de 850 metros. Es una carretera muy apreciada por los amantes de la moto, por su asfalto en buen estado, sus curvas y su paisaje.
La BMW R1250RT se mostró muy ágil y potente en la carretera de Sóller, gracias a su motor bóxer con tecnología ShiftCam, que varía los tiempos y el recorrido de las válvulas en la admisión, ofreciendo una respuesta óptima en todo el rango de revoluciones. El sonido del escape es grave y contundente, pero no molesto. La caja de cambios es de seis velocidades, con un embrague asistido y deslizante, que facilita las reducciones y evita el bloqueo de la rueda trasera.
La parte ciclo de la R1250RT está compuesta por un chasis de doble viga de acero, una horquilla telescópica de 37 mm con ajuste electrónico, un monoamortiguador trasero con ajuste electrónico, y unos frenos de disco con ABS Integral Pro. La suspensión tiene un tarado firme, que ofrece una buena estabilidad y un buen filtrado de las irregularidades del terreno. Los frenos son potentes y dosificables, y el ABS se adapta a las condiciones de la carretera y a la inclinación de la moto.
La R1250RT se inclina con facilidad y traza con precisión, transmitiendo confianza al piloto. El control de tracción activo DTC ayuda a evitar las pérdidas de adherencia, y se puede regular en tres niveles o desconectar. Los modos de conducción son cuatro: Rain, Road, Dynamic y ECO, que modifican la entrega de potencia, la intervención del control de tracción y la suspensión. El modo ECO es el más novedoso, y permite ahorrar combustible, optimizando el consumo y la emisión de gases.
El sistema de radar
El sistema de radar fue el protagonista de mi prueba, y me dejó muy satisfecho. El sistema se activa con un botón en el manillar, y se puede ajustar la distancia con el vehículo que va delante con otro botón. El sistema detecta los vehículos que hay en un radio de 120 metros, y adapta la velocidad de la moto según la situación. El sistema funciona tanto en carretera como en ciudad, y tiene en cuenta la curvatura de la vía y la velocidad de la moto.
El sistema de radar me pareció muy útil y cómodo, sobre todo en los tramos rectos y con tráfico, donde podía relajarme y disfrutar del paisaje, sin tener que estar pendiente del acelerador o del freno. El sistema es muy suave y progresivo, y no da tirones ni frenazos bruscos. El sistema también respeta la velocidad máxima que se ha seleccionado previamente, y no supera el límite permitido.
El sistema de radar se puede desconectar si se desea, y se puede conducir la moto de forma manual. El sistema también se desconecta automáticamente si se acciona el embrague, el freno o el acelerador, o si se cambia de carril. El sistema tiene un indicador en la pantalla TFT, que muestra la distancia con el vehículo que va delante, y el estado del sistema. El sistema también tiene una alerta sonora y visual, que avisa al conductor si hay algún problema o si hay que intervenir.
El equipamiento y el confort
La BMW R1250RT tiene un equipamiento de serie muy completo, que incluye una pantalla TFT a color de 10,25 pulgadas, con navegación y conectividad integradas, un faro delantero LED, un parabrisas eléctrico, un control de crucero dinámico, unos puños calefactables, un asistente de cambio, una suspensión electrónica, un control de arranque en pendiente y un control de freno dinámico. Además, se puede personalizar con diversos paquetes y accesorios opcionales, como el sistema de audio, el asiento calefactable, el navegador, las maletas o el top case.
La BMW R1250RT tiene un confort de marcha muy alto, gracias a su ergonomía cuidada, su protección aerodinámica eficaz, su asiento amplio y cómodo, y su capacidad de carga generosa. La posición de conducción es natural y relajada, con un manillar ancho y unas estriberas bajas. El parabrisas eléctrico se puede regular en altura y ángulo, y ofrece una buena protección contra el viento y el ruido. El asiento se puede regular en dos alturas, y tiene una opción calefactable. Las maletas y el top case tienen una gran capacidad, y se pueden abrir y cerrar con la llave de la moto.
Conclusión
Mi prueba de la BMW R1250RT con radar por las carreteras de Mallorca fue una experiencia increíble, que recomiendo a todos los que les guste la moto y el turismo. Fue un viaje entre el mar y la montaña, con unas vistas impresionantes y una moto que lo tiene todo: potencia, tecnología y confort. Disfruté mucho de la ruta, de la moto, del paisaje y de la gastronomía. Fue un día perfecto, de esos que se quedan grabados en el corazón.


